Retos y oportunidades de la última milla

La distribución de última milla es uno de los puntos críticos en los últimos años para el comercio minorista, especialmente en un mercado tan dinámico como el español. Una mala experiencia en la recepción de una compra o en su devolución pueden acabar en la pérdida de clientes, malas reseñas, retirada de la confianza… especialmente en los negocios con venta electrónica.

Este último tramo del proceso logístico, que lleva los productos hasta el consumidor final, enfrenta numerosos retos y ofrece diversas oportunidades.

En cuanto a los retos, deben afrontar:

Congestión urbana y regulaciones

Las ciudades españolas, como muchas otras en el mundo, enfrentan problemas de congestión y regulaciones estrictas sobre emisiones y tráfico: la logística de última milla se complica (y retrasa, en ocasiones) porque los vehículos de reparto deben circular entre el tráfico y cumplir con diferentes normativas, incluidas las ambientales.

Expectativas del consumidor

Los consumidores actuales esperan entregas rápidas, gratuitas y flexibles. Cada vez hay más presión para cumplir con estas expectativas que, para los negocios minoristas, pueden ser abrumadoras si es un trabajo extra al desarrollado en la tienda física.

Además, estos negocios sin recursos propios de distribución deben confiar en las empresas de reparto y asumir la responsabilidad de la entrega, sin tener capacidad de presión o exigencia. A menudo sufren las penalizaciones de su clientela por incidencias debidas a las empresas de reparto.

Costes elevados

La última milla es la parte más costosa del proceso de entrega. Los gastos relacionados con el combustible, el mantenimiento de vehículos y la mano de obra se suman al envío y afectan a los márgenes de beneficio de los minoristas.

En caso de devoluciones, el proceso se complica y encarece, ya que es aún más costoso que el envío de las compras.

En contrapartida, existen oportunidades en la distribución de última milla:

Tecnología y automatización

La adopción de tecnologías avanzadas, como la inteligencia artificial y el aprendizaje automático, no sólo ayudan en el control de stocks y almacenes, sino que puede optimizar las rutas de entrega y mejorar la eficiencia.

Además, aunque aún parecen soluciones muy lejanas para el sector minorita, los drones y los robots de entrega también están emergiendo como soluciones viables para la última milla.

Modelos de entrega alternativos

Los puntos de recogida, la recogida en tienda y las taquillas inteligentes están ganando popularidad como alternativas a la entrega directa al domicilio. Son modelos que reducen los costes, ofrecen más flexibilidad a la clientela y, además, en ocasiones pueden aportar un ingreso extra a las tiendas físicas.

Repartos alternativos

Aunque existe mucho margen de mejora, empresas como Glovo y Deliveroo han revolucionando la distribución de última milla al permitir que personas físicas realicen entregas utilizando sus propios vehículos, una forma de reducir costes para los minoristas.

En definitiva, la distribución de última milla en el comercio minorista en España enfrenta desafíos al mismo tiempo que ofrece oportunidades de innovación y mejora.

La tecnología ya está jugando un papel crucial en este proceso, permitiendo a las empresas optimizar sus operaciones y ofrecer un servicio de alta calidad, mientas los minoristas tienen la responsabilidad de equilibrar las expectativas de los consumidores con la necesidad de mantener los costes bajo control y adoptar prácticas sostenibles.